Qi (Chi): es un concepto difícil de traducir. Se suele dejar sin traducir pues no existe una palabra en nuestro idioma que abarque todo su significado. La palabra que más se acerca es energía. Como la energía, el Qí, es la sustancia fundamental del universo. Los orígenes de la energía y del Qi son desconocidos, y la hipótesis sobre éstos dependerá de la teorías de la Creación de las diferentes culturas. Los taoístas no establecieron una cosmología como tal, se limitaron a describir un hecho, “de la nada surgió algo”.
El vacío frente al Qi. Yin frente a Yang. De la dinámica entre Yin y Yang surgieron los 5 Elementos. De los 5 Elementos surgieron las Diez Mil Cosas (toda la creación).
Ni el Qi ni la energía pueden ser destruidos, únicamente cambian de forma. Los místicos y científicos taoístas definieron una Ley de la Conservación de la Energía por medio de la observación atenta de la naturaleza y sus ciclos.
Todo se compone de Qi, nuestro cuerpo, la tierra, el agua, el sonido, la luz.
“No hay lugar donde no sea Qi”
Nei Jing – Clásico de Medicina Interna del Emperador Amarillo (500 a.C.)
“El Qi produce el cuerpo humano al igual que el agua se convierte en hielo. Como el agua se congela convirtiéndose en hielo, así se coagula el Qi para formar el cuerpo humano.”
Wang Chong, filósofo (50 nuestra era)
El Feng Shui analiza esta fuerza con la intención de controlar sus manifestaciones sobre el indivíduo.
El Qi es transportado por viento (feng) y se dispersa, pero es retenido cuando alcanza el agua (shui). En la Antigüedad se recogía el Qi para evitar su dispersión y se guiaba para garantizar su control. Esto dió lugar al arte del Feng Shui. Según las leyes del Feng Shui, un lugar que atrae el agua y recoge el viento es óptimo.
El viento y el agua son medios utilizados para controlar el Qi. El viento lo dispersa, por esto debemos controlar sus efectos. El agua recoge el Qi, por esto debemos favorecer su presencia. Ésto garantiza un aporte suficiente de Qi a la casa.
El libro de los Enterramientos nos da pistas para localizar el flujo del Qi sobre la tierra: “Cuando el terreno contiene Qi favorable, la tierra se adapta y se eleva. “Cuando las montañas contienen Qi acumulado, el agua se adapta y las acompaña.”
Donde el agua fluye en la superficie, el Qi fluye bajo la superficie. Cuando se descubre el flujo del Qi, debemos encontrar el punto donde el flujo se hace más lento y se acumula. Éste será el punto óptimo para construir nuestra vivienda.
Copyright © 2009 La Casa del Feng Shui Todos los derechos reservados.